Una investigación revela una falla en los frenos en un accidente de tren fatal en Gales
Una trágica colisión de trenes en el centro de Gales ha llamado la atención sobre graves problemas de seguridad tras revelarse que el sistema de frenos de uno de los trenes falló. Este incidente, que ocurrió cerca de Llanbrynmair el 21 de octubre, provocó la muerte de David Tudor Evans, de 66 años, y dejó a varias personas heridas.
Detalles de la colisión
El accidente afectó a dos trenes: uno que viajaba de Shrewsbury a Aberystwyth y otro de Machynlleth a Shrewsbury. Los informes iniciales indicaron que el tren que iba a Shrewsbury chocó contra un tren parado.
La División de Investigación de Accidentes Ferroviarios (RAIB) informó que el servicio 1J25 sufría un bloqueo del sistema de seguridad contra deslizamiento de las ruedas, que es fundamental para detener el tren de manera efectiva. Los investigadores descubrieron que un sistema de arenado automático, diseñado para mejorar la tracción de las ruedas durante el frenado, había funcionado mal debido a que las mangueras estaban bloqueadas y no podían descargar la arena.
El análisis preliminar de la RAIB indicó que el tren con destino a Shrewsbury viajaba entre 15 mph (24 km/h) y 24 mph (39 km/h) en el momento del impacto, mientras que el tren opuesto se movía a aproximadamente 6 mph (10 km/h).
Aunque ninguno de los dos trenes descarriló, se produjeron daños importantes en sus extremos delanteros. La investigación continúa, en particular en lo que respecta a la velocidad y las condiciones que llevaron a la colisión.
Sistemas de seguridad bajo escrutinio
Ambos trenes estaban equipados con sistemas de protección contra deslizamiento de ruedas, similares a los frenos antibloqueo de los vehículos. La línea Cambrian también utiliza el Sistema Europeo de Gestión del Tráfico Ferroviario, que proporciona datos de señalización críticos directamente a los trenes.
Durante su investigación, la RAIB observó que el tren que se dirigía hacia el oeste debía detenerse en Talerddig para permitir el paso del tráfico que se dirigía hacia el este. Sin embargo, los datos de la grabadora de datos del tren revelaron una serie de aplicaciones de los frenos antes del choque, incluido un freno de servicio seguido de una solicitud de frenado de emergencia justo antes del impacto.
Tras la muerte del Sr. Evans, la Policía de Transporte Británica recibió críticas por su gestión del apoyo a su familia. Posteriormente, emitieron una disculpa por cualquier sufrimiento causado durante este difícil período.
Transport for Wales y Network Rail enfatizaron su compromiso de cooperar con las investigaciones en curso y han implementado controles de seguridad mejorados en trenes y vías mientras se preparan para la reapertura de los servicios en la línea Cambrian a finales de este mes.
A medida que avanza esta investigación, se pone de relieve la necesidad urgente de establecer protocolos de seguridad exhaustivos en los sistemas ferroviarios de todo el Reino Unido. El resultado probablemente influirá en las prácticas operativas futuras y las medidas regulatorias destinadas a prevenir tragedias similares.