Se multiplican los informes sobre el caso de Mohamed Al-Fayed, un conocido empresario egipcio que vive en el Reino Unido. Su nombre está ahora en el centro de un gran escándalo que involucra acusaciones de violencia y abuso sexual. Esta situación se ve agravada por las denuncias presentadas por alrededor de 400 presuntos testigos y víctimas de los supuestos delitos atribuidos al magnate, fallecido a la edad de 94 años el año pasado. A estas acusaciones se suman revelaciones cada vez más embarazosas sobre la inacción de la policía y las autoridades británicas.
Hasta ahora, Scotland Yard ha afirmado que recibió los primeros informes ya en 2005 y abrió dos expedientes específicos que posteriormente fueron cerrados por la Fiscalía de la Corona, la segunda vez bajo la dirección del actual Primer Ministro Keir Starmer. Esto sucedió se justificó por la falta de pruebas suficientes. Sin embargo, la familia de Samantha Ramsey, una joven ex empleada de los famosos grandes almacenes Harrods, cuestionó estas afirmaciones. Según ellos, Samantha había denunciado acoso sufrido por el empresario ya en 1995, cuando ella sólo tenía 17 años, pero los investigadores no prestaron atención a sus palabras.
Wendy y Emma, madre y hermana de Samantha, dijeron a la BBC que “muchas víctimas podrían haberse salvado” si el sistema de investigación hubiera funcionado correctamente. En el contexto actual, decenas de mujeres han iniciado una batalla legal para obtener una indemnización tanto del Estado como de los herederos del patrimonio de Al-Fayed. Entre estos últimos se encuentra el fondo soberano de Qatar, que tomó el control de Harrods en 2010 y cuya estructura corporativa se sospecha que ha facilitado un plan para reclutar mujeres jóvenes vulnerables.
Las acusaciones no se limitan a Harrods; también involucran a otras empresas pertenecientes a Al-Fayed. Entre ellos se encuentran ex empleados del hotel Ritz de París y ex jugadoras del equipo femenino del Fulham Football Club. La gravedad de las denuncias plantea dudas sobre cómo se han manejado las denuncias a lo largo de los años y sobre la responsabilidad de las instituciones pertinentes al tratar con temas tan delicados. casos.